El órgano sexual del mundo
Sin la destructiva división occidental entre cuerpo y alma - ¡Una unión judeo-china contra Occidente!
Por: Relaciones Internacionales
Relaciones mundiales: El judaísmo europeo ya se está apareando con el mundo venidero
(fuente) Soñé que el presidente de China venía a mí en un sueño y me decía que me revelaría un secreto si yo le revelaba uno a él. Y así me revela, con una sinceridad total que solo puede existir entre nosotros, el mayor secreto del mundo. La verdad es que el Emperador aún vive - y China es un imperio secreto. Y en realidad, según los sabios del Emperador que solo se equivocan una vez cada mil años, según los informes más secretos del Partido - China no tiene oportunidad contra América. Y ¿por qué?, dicen los sabios - porque no tenemos judíos. Toda la interioridad y las ideas vienen de América, que es la cabeza del mundo, y nosotros somos solo el cuerpo. Y aunque el cuerpo sea mucho más grande, gordo y fuerte que la cabeza, la cabeza seguirá controlando el cuerpo, porque los judíos son el cerebro de América.
En cambio, ustedes tienen muchos judíos superfluos que son verdaderas bestias, que han perdido todo espíritu. Estoy dispuesto a darles establos dentro del palacio, que vengan con nosotros y sean el cerebro de China. Porque no importa cuánto cultivemos el cuerpo bestial - solo le da más poder y gobierno al espíritu dentro del cerebro. Pero si ustedes los judíos le dan precisamente al cuerpo del mundo el espíritu, que el alma resida en el vientre, imaginen qué tipo de criatura podría ser. Sin la destructiva división occidental entre cuerpo y alma - ¡una unión judeo-china contra Occidente! Y les prometo que no les haremos como la cultura occidental, que después de que coronaron a Europa sobre el mundo, pensaron que podían prescindir de ustedes. Y miren lo que quedó.
Entonces le digo: mi señor ángel de China, hay un órgano pequeño en el hombre que también controla el cerebro: el instinto. Y así es como los judíos controlamos el mundo, somos el órgano sexual del mundo - no el cerebro. Y el instinto malo ya tiene una función, el pequeño Satán [yetzer hará] ya está ocupado preocupándose por la próxima generación, por el mundo venidero. Por lo tanto, los mejores de nosotros ya no están en este mundo, ya han partido a la carrera. Ya nos estamos preparando para el apareamiento con otro mundo.